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viernes, 12 de octubre de 2012

Opinión - DÍA DE LA RESISTENCIA INDIGENA

HATUEY -   EL PRIMER REBELDE DE AMÉRICA




Por Verbo Rebelde

Si mi memoria pudiera atravesar el tiempo y poder recoger sentimientos de experiencia que mi cuerpo presente no haya podido vivir, sin duda alguna hoy 12 de octubre me embargaría una gran tristeza, al revivir en ella tan nefasto momento en la historia de nuestros ancestros originarios. 

Engañados en un principio, pero no por tontos, más si por honestos y humanos, poseedores de una cultura de vida inmensamente superior a la de sus futuros exterminadores, creyeron en blancos rostros y cruces liberadoras, que para ellos no representaban más que la curiosidad por lo nuevo ante sus ojos. 

Así comienza la conquista imperial en nuestras tierras, por allá en la isla de La Española en el año 1492. 

Mas no quiero hablar del asesino, quiero recordar a uno de nuestros primeros rebeldes, Hatuey, el gran Cacique de Caciques, como se le conocía, y que luego sería llamado “EL Primer Rebelde de América” 

Cacique de las tribus Taino, provenientes estas de las cabeceras del Orinoco, Hatuey se rebeló contra los conquistadores en su isla, y al no poder contra tamaño poderío, se dirige a Cuba junto a un grupo de guerreros, contacta a los indios locales y allí inicia una resistencia contra la ocupación imperial. Arrojando el oro al rio, pues entendía que este representaba el dios para el hombre blanco, inicia así su lucha, con piedras, palos, lanzas, en la búsqueda de defender lo que por derecho les pertenecía.

Enfrentado a un poderío militar que contaba con caballo, perros, fuego de artillería y armaduras de hierro, fracasa, es capturado por sus enemigos y condenado a morir en la hoguera en 1511… 

“Hatuey se resistía, el calor penetraba en su piel, transcurría un día de octubre de 1511…su cuerpo estaba a punto de ser convertido en cenizas…Un sacerdote se le acercó para que aceptara el bautismo porque este le abriría una mejor vida en el cielo. Hatuey lo rechazó, su coraje no admitía súplicas, y así murió…bárbaramente, quemado vivo.” 

Antes de morir, el bravo cacique pronunciaría lo que se ha convertido en una frase de coraje, al decirle al cura - una vez más la iglesia – cuando este se le acerco, y refiriéndose a sus enemigos dijo, “ellos también van al cielo? a lo que le portador de la cruz respondió que sí, el guerrero contesta “entonces envíeme a un lugar donde no vuelva a verlos” 

Así muere uno de los más feroces combatientes, en lo que fuera nuestros primeros pasos por alcanzar la independencia. 

Y aun con tanto genocidio a alguien se le ocurrió el ofensivo nombre de “Día de La Raza”, llevando implícito en si el racismo. 

Este es EL DIA DE LA RESISTENCIA INDIGENA, herederos somos de tan grandes antepasados, y nuestra responsabilidad es honrarlos con nuestro respeto y nuestra resistencia a los actuales imperios que pretenden al igual que entonces, hacernos claudicar.